
Nos fuimos de excursión a
Jumilla, tierra de viñedos,pasamos un buen rato.
Otro
viajecito y llegamos a comer a una venta en mitad del monte, un arroz de los de siempre,de los ricos.
Antes de entrar, nada más bajar del coche, vemos salir a tres hombres, de cómo iban podías llegar a la conclusión de que el vino del lugar es más bien cabezón, entre trompicón y trompicón pasa por allí un rebaño, con pastor y perro incluido,y nos quedamos mirándolo.
Era uno de esos pocos días en que te puedes
permitir perder 5 minutos viendo pasar un rebaño, de cabras y ovejas.
Y el más canijo de los tres y también el más contento,nos dice:"
Las negras son cabras y las otras las ovejas".Aún queda gente buena por el mundo.
Y riéndose se montan tan contentos en su furgoneta,pero antes de irse paran a nuestro lado con la puerta lateral abierta,se quita el puro de la boca y remata la faena
"El trabajo es salud.Pues que viva la triberculósis"Risas y más risas, y sólo lo puedes entender después de comerte un arroz regado con vino,
vinito del bueno.

En
fin....que aún queda gente buena.